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El Equipo de Gobierno Municipal ha aprobado en el Pleno extraordinario celebrado el pasado jueves, 10 de febrero, el plan de limpieza más ambicioso desarrollado en el municipio. El pliego para adjudicar la gestión indirecta por concesión del servicio de recogida y transporte de residuos sólidos urbanos y asimilables, y la limpieza viaria de urbanizaciones, paseo marítimo y eventos varios en el término municipal de Benalmádena, dará servicio también a las urbanizaciones durante los próximos 10 años, cubriendo así todo el término del municipio. Con ello, se solucionará una de las mayores demandas vecinales que durante años se han producido en materia de limpieza viaria.



Con el fin de que salga a licitación cuanto antes y pueda ponerse en marcha para el próximo mes de abril, el plan de limpieza se ha aprobado hoy en el Pleno. Las condiciones del pliego establecen mejoras sustanciales en la limpieza en las barriadas de Benalmádena, de forma que se concentra la actuación municipal en las zonas del casco urbano de Arroyo de la Miel y de Benalmádena Pueblo, mientras que la recogida de residuos sólidos urbanos, la limpieza viaria de las urbanizaciones, del paseo marítimo y de los mercadillos serán trabajos que realizará la nueva empresa adjudicataria de este servicio. Además, en la parte que se adjudicará también se incluye el refuerzo del servicio de verano de limpieza y en fechas clave como Semana Santa, Navidad, Fiestas Patronales o la Veladilla de la virgen del Carmen. El pliego saldrá a licitación por un valor de 6.136.000 euros, y contempla una superficie de actuación de 25 zonas, con lo que entre ambos servicios (el municipal y el que sale a licitación) se cubrirá la totalidad del municipio.



El plan de limpieza se ha realizado durante un año por funcionarios y técnicos municipales, mediante un trabajo exhaustivo, fiable y acorde con las necesidades del municipio. Este plan consistirá en un sistema mixto en el que continuará teniendo un papel esencial el servicio de limpieza de los Servicios Operativos.



Por ello, el alcalde ha resaltado en el transcurso de la sesión plenaria, en referencia a las inquietudes y preocupaciones de los trabajadores municipales, que “la bolsa de trabajo de los Servicios Operativos se va a mantener y además se seguirá con el proceso para dotar al municipio con 16 nuevas plazas de operarios”, al tiempo que ha añadido que la única consecuencia que tendrá esta mejora en el servicio de limpieza será “la reducción de las horas extraordinarias que actualmente se realizan, y como consecuencia se favorecerá la contratación de personas que están en situación de desempleo”.



Con este plan, los operarios de los Servicios Operativos se podrán dedicar en exclusiva a la limpieza de las zonas urbanas, consiguiendo con ello que su trabajo obtenga mejores resultados y más visibles. Además, con la puesta en marcha de esta iniciativa, no se verán afectados ni los trabajadores municipales ni los empleados de la actual empresa responsable de la recogida de residuos sólidos, GSC, ya que la nueva empresa adjudicataria tendrá que incorporar a todos los trabajadores de la antigua, que son un total de 61.



El regidor municipal ha hecho referencia también en el Pleno a la mejora que supondrá para la flota de vehículos que realizan la limpieza en Benalmádena el hecho de que la nueva empresa adjudicataria tenga el compromiso de adquirir nuevos vehículos. “Creo que este sistema es el más adecuado para modernizar y mejorar el servicio de limpieza en el municipio, y sólo el tiempo hará ver que esta iniciativa es un servicio complementario a la limpieza urbana y no una privatización”.



Otros municipios costasoleños ya han puesto en marcha este plan de limpieza, “como es el ejemplo de Fuengirola, donde ha sido todo un éxito”, ha declarado Enrique Moya.



Por último, el alcalde lamentó la ausencia en el pleno de los socialistas Javier Carnero y Joaquín Villazón, y destacó que “es incompresible que la oposición se haya negado a que los sistemas de limpiezan lleguen a todas las urbanizaciones”, matizando que “el plan incluye las urbanizaciones que no están recepcionadas pero en las que sí viven benalmadenses”.