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El alcalde de Benalmádena, Javier Carnero, ha informado sobre la aprobación definitiva del artículo 139 de la Ordenanza de Uso Comercial del Tipo-Residencial Hotelero, que prohibe la división horizontal de estos establecimientos para su conversión en viviendas y venta posterior.



“Esta iniciativa supone una garantía de defensa para el mantenimiento y protección de nuestra planta hotelera, vital para el fomento del comercio y el turismo”, ha destacado el alcalde Javier Carnero.



El alcalde ha recordado que esta modificación ya comenzó a tramitarse por parte del anterior equipo de gobierno, pero es ahora cuando se ha llevado a pleno para su aprobación definitiva.



El objetivo de esta modificación de la ordenanza es evitar que parcelas a las que el planeamiento ha dotado de mayor aprovechamiento urbanístico, por el interés público que se le supone a las instalaciones hoteleras en un municipio turístico como Benalmádena, puedan destinarse a viviendas y apartamentos y ser vendidos de forma independiente a terceros. “Esta práctica, además de suponer la desaparición de la planta hotelera, origina problemas de urbanismo e infraestructuras, porque supone que aparezcan viviendas para las que el planeamiento no ha previsto las correspondientes dotaciones de zonas verdes y equipamientos”, ha destacado el alcalde.



A partir de ahora, los proyectos de edificios destinados a uso comercial del tipo residencial-hotelero deberán incorporar, al recibir la licencia urbanística, su anotación en el Registro de la Propiedad del uso o destino de carácter hotelero de la edificación, así como la imposibilidad de segregar o dividir la misma.



“Este equipo de gobierno quiere proteger y promover la creación de establecimientos hoteleros, ya que el turismo es el motor económico de Benalmádena, y no podemos permitir que en tiempos de recesión financiera nuestros hoteles sean pasto de la especulación urbanística”, ha valorado el alcalde.