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El Ayuntamiento de Benalmádena ha aprobado durante el transcurso del pleno ordinario la adaptación definitiva del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) a la nueva Ley del Suelo de Andalucía (LOUA). “Nos congratulamos por el hecho de que hoy finalicemos un expediente que se ha acabado por dilatar en el tiempo unos seis años”, ha declarado el Alcalde de Benalmádena, Javier Carnero.

“Cuando el último PGOU se aprobó en 2003, este Ayuntamiento inició un proceso de adaptación excesivamente largo por culpa del mal planteamiento realizado por el ex alcalde Enrique Bolín, que entre 2003 y 2007 se dedicó a sembrar de obstáculos el proceso de adaptación en lugar de apostar por una negociación coherente con la Junta”, ha recordado Carnero.

El Alcalde ha indicado que empezaron los trámites de adaptación a la LOUA “de forma inmediata al acceder a la Alcaldía en 2007, y durante dos años estuvimos trabajando de forma constante, un trabajo que fue continuado con la misma dedicación por la siguiente Corporación, es justo reconocerlo”.

Gracias a la adaptación a la LOUA, el Ayuntamiento puede tramitar con mucha más agilidad y rapidez cualquier modificación, “cambios como la aprobación inicial de una innovación en una parcela en Doña María, que hemos llevado hoy al pleno para cederla tras su aprobación a la Junta para la creación de un nuevo centro educativo”.

Carnero citó más ejemplos de los beneficios que conlleva la adaptación a la LOUA: “Antes las innovaciones en el PGOU costaban mucho más tiempo y esfuerzos sacarlas. Ahora vamos a acelerar los trámites para, por ejemplo, modificar una parcela en Los Nadales para la creación de un parque y viviendas sociales, un proyecto que iniciamos en 2008 y que el PP abandonó por completo durante sus dos años en el Ayuntamiento porque ya sabemos que a este partido no le interesan ni las zonas verdes ni las viviendas sociales”.

Por su parte, el Teniente de Alcalde Francisco Artacho subrayó otro aspecto importante de la adaptación del PGOU a la LOUA: “Un elemento esencial es el aumento de las dotaciones de VPO: cualquier desarrollo urbanístico futuro en un sector incluye la obligación de reservar un 30 % del suelo para la construcción de viviendas protegidas”.