El Ayuntamiento pone en marcha la campaña de prevención contra la oruga procesionaria
Delegación de parques y jardines

El Ayuntamiento pone en marcha la campaña de prevención contra la oruga procesionaria

El Ayuntamiento de Benalmádena, a través de la Concejalía de Parques y Jardines, ha puesto en marcha la campaña de prevención contra la procesionaria en el arbolado público del municipio, una actuación enmarcada en el programa anual de tratamiento fitosanitario y que tienen como principal objetivo eliminar las larvas de esta plaga para evitar los daños que éstas puedan ocasionar cuando se conviertan en orugas, tanto en los árboles como en los animales y personas. Los trabajos de fumigación, que se llevarán a cabo por la empresa CESPA, se prolongarán hasta el 20 de noviembre, y se desarrollan en la época de eclosión de las larvas. El horario de las actuaciones será reversible, pues se podrán realizar tanto en horario de mañana como de noche, según las situaciones de los árboles a tratar.

El edil del área, José Antonio Serrano, ha informado hoy que “el tratamiento se realizará mediante pulverización foliar, a pistola con cañón atomizador de 200 ó 600 litros y bomba de alta presión”. “Utilizaremos un método que busca alcanzar toda la masa foliar y conseguir la mayor eficacia posible”, ha detallado el concejal, que ha apuntado que “los operarios que llevarán a cabo los trabajos serán cualificados y contarán con la titulación exigida por la Consejería de Agricultura y Pesca; además, se cumplirán todas las medidas de seguridad necesarias tanto para la protección de los trabajadores como de los transeúntes”.

“Estas actuaciones son de suma importancia para garantizar la conservación y la salud del arbolado urbano frente a una de las plagas más importantes en los pinares mediterráneos”, ha expresado el edil, que ha detallado que “la procesionaria es un lepidóptero que puede afectar a todas las especies de pinos, pero que siente predilección por determinadas especies como el pino laricio, el canario o el silvestre”. “Estos insectos también afectan a la salud, ya que a partir del primer mes de desarrollo pueden provocar irritaciones y urticarias en la piel al contacto con personas y animales”, ha indicado Serrano, que ha hecho un llamamiento a todos los benalmadenses “para que mantengan sus propiedades en un estado fitosanitario adecuado, tanto por los efectos que el no hacerlo puede ocasionar a su arbolado, como por la necesidad solidaria de evitar que se creen focos de infestación que provoquen perjuicios a los vecinos y hagan inútiles los esfuerzos de los mismos en mantener los pinos libres de carga”.