Las calles más céntricas de Benalmádena Pueblo se vistieron ayer de solemnidad y devoción con la salida procesional de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Cautivo y María Santísima de la Esperanza, protagonista de la noche del Martes Santo. Cientos de vecinos y visitantes acompañaron a los sagrados titulares de la hermandad, dos tronos portados por unos 80 cofrades y acompañados por más de medio centenar de nazarenos, con túnicas blancas y verdes. La cofradía, que comenzó su estación de penitencia a las 20:30 horas, desde su Salón de Tronos, ubicado en la calle San Miguel, contó con el acompañamiento musical de la Banda de Música de Almogía y de la Banda de Música de la Expiración de Málaga, que estrenó la marcha ‘Flor de Primavera’, compuesta por el músico malagueño Pablo Buadino para la Virgen de la Esperanza.

La alcaldesa, Paloma García Gálvez, presidió la comitiva oficial, acompañada por la concejala de Participación Ciudadana, Ana Macías, entre otros miembros del Gobierno municipal, así como también por el hermano mayor de la cofradía, Tomás Zaragoza. “Es un honor para mí acompañar a esta hermandad, que durante sus veinte años de trayectoria ha conseguido engrandecer nuestra Semana Santa de Benalmádena, aportando entusiasmo y solemnidad, y ha conquistado el cariño y el respeto de todo su pueblo”, destacó la regidora, que resaltó que “nuestras cuatro hermandades de pasión son un ejemplo de esfuerzo, tesón y dedicación, y a ellos les debemos que nuestra Semana Mayor se haya consolidado como uno de los principales referentes culturales de la provincia”. “Invito a todos los benalmadenses y visitantes a que compartan con nosotros nuestras procesiones, nuestras costumbres y nuestra cultura y a que se adentren en la belleza de nuestra Semana de Pasión”, añadió García Gálvez.

La entrada de los tronos en la calle Maestra Ayala, procedentes de la avenida Juan Luis Peralta, fue un año más uno de los momentos más esperados del recorrido, dada la dificultad que presenta el pasaje debido a la estrechez en la confluencia de ambas vías. Las saetas acompañaron a toda la procesión, que se inició en el Salón de Tronos de la hermandad, en la calle San Miguel, y discurrió por las avenidas del Chorrillo y Juan Luis Peralta para llegar a la calle Maestra Ayala. El recorrido continuó por la calle Marbella, la Plaza de España y las calles Lomillas, Alamos y Real antes de alcanzar de nuevo la avenida Juan Luis Peralta para regresar por la avenida del Chorrillo y la calle San Miguel hasta el lugar de partida.