Centenares de vecinos y visitantes acompañaron ayer a la Cofradía de Nuestro Padre Jesús en su entrada en Jerusalén, María Santísima del Auxilio, Santísimo Cristo de la Redención y María Santísima de los Dolores, primero durante la guardia de sus titulares, el Cristo de la Redención y la Virgen de los Dolores, en la capilla de su casa hermandad –en la calle Parra- y, posteriormente, en su tradicional traslado, que contó con la participación de la Escuadra de Gastadores y Banda de Cornetas y tambores de los Caballeros Legionarios de Fuengirola. El recorrido incluyó las calles Limonero, Naranjo, Ciprés, San Juan, Las Flores y la avenida de la Constitución, hasta su llegada a la Plaza de la Iglesia, donde se rindió honores a la Virgen de los Dolores, acto oficiado por el director espiritual y párroco de la Iglesia de la Inmaculada Concepción, Agustín Carrasco. El traslado prosiguió por la avenida de la Estación y las calles Vicente Aleixandre, Nacimiento, Naranjo y Limonero hasta llegar de nuevo a la casa hermandad, donde caballeros legionarios y bomberos de Benalmádena procedieron a la entronización del Cristo de la Redención, que celebrará hoy su estación de penitencia por las calles de Arroyo de la Miel.

La concejala de Cultura, Yolanda Peña, asistió al traslado, acompañada por la edil de Participación Ciudadana, Ana Macías, entre otros miembros del Gobierno municipal. “El encomiable trabajo que realizan las cofradías y hermandades de pasión del municipio ensalzan y engrandecen nuestra Semana Mayor, que nos ofrece momentos tan emotivos y solemnes como este traslado”, manifestó Peña, mientras que Macías señaló que “fruto de este esfuerzo está la consolidación de nuestra Semana Santa como una de las más visitadas de la provincia de Málaga”.