El Ayuntamiento de Benalmádena ha exigido hoy a la Junta de Andalucía que “asuma de una vez por todas sus obligaciones con la Escuela de Hostelería ‘La Fonda’ y deje de dañar, como viene haciendo desde hace ya mucho tiempo, la imagen de una institución formativa que constituye un referente en el sector”. La alcaldesa, Paloma García Gálvez, ha criticado que el Gobierno autonómico “mantenga en una grave situación de abandono a alumnos, profesores y proveedores, sin ofrecer información ni atender a sus necesidades económicas”. El Ejecutivo regional, según han denunciado los propios trabajadores y estudiantes de ‘La Fonda’, ubicada en Benalmádena Pueblo, no ha autorizado a la escuela de hostelería a comenzar el curso, a pesar de que las clases debían haberse iniciado a primeros de septiembre, y adeuda tres nóminas a los profesores y unos 300.000 euros a los proveedores. El restaurante permanece cerrado, sin poder atender las reservas con las que contaban. “Se trata de un nuevo despropósito por parte de la Junta de Andalucía, que sigue manteniendo una conducta indigna con los profesionales y los alumnos de este centro formativo y sigue jugando con el prestigio de la escuela de hostelería”, ha afirmado la primera edil.

García Gálvez ha reclamado al Gobierno andaluz que preside Susana Díaz que “convoque de forma inmediata el consejo rector del Consorcio de la Escuela de Hostelería ‘La Fonda’ y no siga escondiéndose para no dar explicaciones de su mala gestión”. El Ejecutivo regional de PSOE e IU no convoca dicho consejo desde hace más de dos años, a pesar de los requerimientos del Consistorio benalmadense en este sentido, según ha recordado la alcaldesa, que ha censurado “la falta de respeto que la Junta sigue mostrando hacia los profesores y los alumnos de ‘La Fonda’, así como hacia el Ayuntamiento, que forma parte de un consorcio que no se reúne y donde el Ejecutivo autonómico no ofrece las pertinentes explicaciones”.

En este sentido, la regidora ha destacado que el Gobierno andaluz ya puso en peligro el pasado año la viabilidad de la escuela de hostelería y hace apenas unos meses puso en entredicho la imagen del centro formativo en relación con unas ayudas que, según la Junta, no estarían justificadas”. “PSOE e IU primero intentaron estrangular económicamente a una escuela que es un referente en la formación de calidad y después se dedicaron a jugar con su prestigio al poner en entredicho su gestión por unas cuentas que no se comprobaron durante un lustro, lo que refleja la falta de rigor y de transparencia de la Junta”, ha apuntado la primera edil. “Ahora de nuevo vuelven a las andadas y ni ofrecen información, ni abonan las deudas, ni aportan soluciones”, ha señalado García Gálvez, que ha subrayado que “están causando un perjuicio enorme a los cerca de 60 alumnos y a la decena de profesores que siguen esperando el inicio del curso, así como a los proveedores de la escuela de hostelería, a los que se sigue adeudando una importante cuantía económica”.