• El edil Juan Olea recuerda que estas tareas son claves a las puertas del verano y que las mismas se han visto retrasadas a consecuencia de las lluvias durante los dos últimos meses.
• Todo este conjunto de actuaciones viene completado con la aplicación de tratamientos fitosanitarios puntuales dependiendo de la especie y la época de aplicación.
El edil de Medio Ambiente, Juan Olea, ha informado de los trabajos de desbroce en arroyos y parcelas municipales que se están realizando por parte del Ayuntamiento desde que llegó el gobierno de Juan Antonio Lara, comenzando por la zona de Carvajal con la mirada puesta en la prevención de incendios.
El edil ha incidido en que las últimas lluvias han obligado a modificar estas labores, toda vez que ha puesto en valor el trabajo que se viene realizando desde la Delegación de Medio Ambiente ahora para culminar estas tareas con la llegada del buen tiempo. El Ayuntamiento va a iniciar los trabajos en Santángelo Norte, así como en zonas de servidumbre.
“Estas actuaciones en cauces y arroyos que se realizaron el año pasado y los de este resultan vitales para evitar problemas de seguridad con las fuertes precipitaciones que estamos recibiendo”, señaló.“El Ayuntamiento tiene previsto culminar todos esos trabajos antes de julio y agosto, donde no podemos acometer desbroces” por riesgo de incendios en cumplimiento de la legislación vigente materia de dominio público hidráulico DPH, y en materia de incendios forestales.
Estas tareas preventivas consisten en mejorar, tanto la capacidad de desagüe de los arroyos, como para realizar un tratamiento especial para evitar la rápida propagación de incendios forestales, y facilitar el acceso a las labores periódicas de efectivos de policía y limpieza.
A través de la Sección de Medio Ambiente, se lleva a cabo el mantenimiento de la vegetación en las zonas de protección de cauces de los arroyos, así como de algunas parcelas municipales que se encontraban en la zona de influencia forestal.
El edil ha enfatizado que las principales actuaciones incluyen desbroces selectivos, siempre respetando la vegetación autóctona, acebuches, chopos, mimbreras, y similares, la eliminación de ejemplares de especies exóticas invasoras, acacias, ricinos, cañaveral y otros, así como podas en altura, de ramas próximas a las fachadas, apeos de arbolado secos, reducción del combustible vegetal para su incorporación en el sustrato, así como la retirada de las numerosas acumulaciones de residuos sólidos urbanos que contaminan y distorsionan de manera negativa el paisaje fluvial de los cauces.
Todo este conjunto de actuaciones viene completado con la aplicación de tratamientos fitosanitarios puntuales dependiendo de la especie y la época de aplicación y también con la plantación con especies de ribera en los tramos de cauce que reúnan las condiciones adecuadas para su correcto desarrollo.